Recibidas 112 solicitudes de ayuda al comercio, hostelería y autónomos
A lo largo de esta semana, el Ayuntamiento de Abanto-Zierbena comenzará a ingresar la próxima semana en la cuenta de los hosteleros, comerciantes y autónomos que desarrollan su actividad en el municipio, las subvenciones prometidas para paliar la crisis suscitada en el sector por la pandemia del Covid-19.
El Consistorio, con un fondo que alcanza los 200.000 euros, entregará ayudas de hasta 900 euros a cada comercio y establecimiento hostelero cerrado durante el confinamiento y teniendo en cuenta también a aquellos que se han mantenido abiertos con una reducción del 75% en su facturación.
Finalmente han sido 112 los negocios de Abanto-Zierbena que han tramitado la petición de esta ayuda. Actualmente, los técnicos municipales están analizando cada una de las peticiones de manera pormenorizada, para tratar de ingresar a la mayor brevedad posible esta prestación económica que será de entre 900 y 600 euros.
La prioridad de este programa, compatible con las subvenciones de otras administraciones públicas, es colaborar con el comercio y negocio local que se han visto obligados a paralizar su cierre por el Estado de Alarma. A través de esta línea de ayudas municipales, el Consistorio otorgará 900 euros a cada comercio y establecimiento cerrado y 700 euros a aquellos que aun habiendo abierto han obtenido un 75% de reducción en la facturación. Las personas autónomas recibirán 600 euros por el cierre y 400 euros aquellos autónomos que hayan reducido su facturación.
“Nuestro municipio cuenta con 180 comercios y establecimientos hosteleros y otros 170 aproximadamente autónomos. Más de un centenar de vecinos y vecinas han decidido beneficiarse de estas subvenciones, lo que nos da una fotografía importante de que este sector necesitaba ayuda y se la estamos dando, de que estamos justo donde nos necesitan” destaca la alcaldesa de Abanto Zierbena, Maite Etxebarria.
21 ampliaciones de terrazas
Especial es el empujón al sector hostelero con la ampliación de terrazas. 21 locales han podido ampliar sus terrazas para poder ofrecer un mejor servicio y lograr un equilibrio entre ventas, aforo de clientes y seguridad. Para ello, desde el Ayuntamiento ha reubicado mobiliario urbano y se han cerrado accesos para mejorar los espacios en esta excepcional situación.
No se ha cobrado la tasa de terrazas a los locales mientras ha durado la desescalada y el estado de alarma y se está trabajando en que esta suspensión de pago sea hasta final de año. Flexibilizar la normativa en cuanto a las terrazas ha requerido modificar la ordenanza municipal a través de un pleno extraordinario.
Además, los primeros 700 bonos de verano de los 2800 que se van a lanzar a lo largo de año, se vendieron los primeros tres de días campaña en junio. La campaña está abierta hasta el próximo 31 de julio con un participación de casi 50 comercios, lo que supondrá durante el mes de julio un impacto económico de 21.000 euros. “Estamos dando una respuesta eficaz a las necesidades que han surgido con la crisis sanitaria, poniendo el foco en nuestro tejido comercial y hostelero. Debemos apoyarles para que sigan adelante, para que todas esas familias que dependen de esos negocios puedan salir a flote”, concluye Etxebarria.